¿Tu aire acondicionado no enfría? Este componente olvidado podría ser el culpable

Está situado normalmente en la parte delantera del vehículo, justo delante del radiador, y su función principal es disipar el calor del gas refrigerante que circula por el sistema. En otras palabras, enfría el gas del aire acondicionado cuando está en estado líquido para que el aire que salga por las rejillas del salpicadero sea agradablemente fresco.

Ese gas en estado líquido, que desde hace unos años es el R-1234YF viene del compresor a una alta temperatura y, cuando el condensador consigue enfriarlo, pasa por el evaporador, otra pieza clave del sistema, que vuelve a convertirlo a un estado gaseoso para que finalmente llegue al interior del habitáculo.

Cuando el condensador falla, se nota. El aire deja de salir frío, el sistema puede hacer ruidos extraños o incluso encenderse una luz de advertencia en el salpicadero. Las causas más comunes de avería suelen ser fugas, obstrucciones internas o daños por piedras o suciedad que entran desde el exterior. Al estar tan expuesto, no es raro que sufra con el paso del tiempo.

¿Cuánto cuesta reparar el condensador?

Reparar o sustituir un condensador no es precisamente barato, pero tampoco es de las averías más caras. El precio puede variar bastante según el modelo del coche, pero en general, cambiarlo puede costar entre 400 y 800 euros, incluyendo la mano de obra. Si solo hay que reparar una fuga o limpiar una obstrucción, el coste puede ser menor, aunque siempre conviene hacer una revisión completa del sistema.

Lo importante es no ignorar los síntomas. Un aire acondicionado que no enfría bien no solo es incómodo, también puede afectar a otros componentes del sistema si se fuerza su funcionamiento. Además, en algunos coches modernos, el aire acondicionado también ayuda a desempañar los cristales, así que su buen estado es clave para la seguridad.

En resumen, si notas que el aire acondicionado no rinde como antes, no se debe dejar pasar: una revisión a tiempo puede evitar una factura más abultada después.